La declaración de la renta es una obligación fiscal que debemos cumplir anualmente para informar a la administración tributaria sobre nuestros ingresos, gastos y deducciones correspondientes al año fiscal. Sin embargo, en ocasiones puede surgir la duda de si es posible modificar la declaración de la renta una vez que ya ha sido presentada. En este artículo, exploraremos esta cuestión y analizaremos las circunstancias en las que se permite hacer modificaciones a la declaración de la renta.
En España una vez que la declaración de la renta ha sido presentada ante la autoridad tributaria competente, se considera como una declaración final y definitiva. Esto significa que los datos y la información proporcionada en la declaración no se pueden cambiar, a menos que se cumplan ciertas excepciones o condiciones especiales.
Dos opciones: rectificación o complementaria
Si es cierto que existe la posibilidad de presentar una declaración complementaria o rectificativa en caso de haber cometido errores u omisiones en la declaración original. Esta opción permite corregir cualquier información errónea o incompleta que se haya proporcionado previamente.
La declaración será rectificativa si hay fallos en la declaración en tu contra, es decir, si la segunda declaración que se quiere presentar sale a pagar menos a Hacienda o a devolver más a tu favor, y será complementaria si hay fallos en la declaración contra los intereses de Hacienda, es decir, si la segunda declaración que se quiere presentar sale más a pagar a Hacienda o menos a devolver a tu favor. También se tratará de una rectificación de la autoliquidación cuando, tras hacer las modificaciones oportunas, el resultado de la segunda declaración que se quiere presentar no varía con respecto a la primera autoliquidación presentada.
Plazo para modificar una declaración
En España, para modificar la declaración de la renta una vez presentada, es necesario presentar una declaración complementaria o rectificación de la misma dentro del plazo establecido por la Ley General Trinutaria, que es un plazo de cuatro años desde el día siguiente a la finalización del plazo de presentación.
Esta declaración debe incluir los cambios necesarios y justificar las razones por las cuales se está presentando. Algunos de los motivos válidos para presentar una declaración complementaria podrían ser la inclusión de ingresos no declarados, la corrección de deducciones o la rectificación de errores en los datos personales.
Es importante tener en cuenta que la presentación de una declaración complementaria puede tener implicaciones fiscales adicionales. Dependiendo de los cambios realizados, es posible que se deba pagar una cantidad adicional de impuestos o, en algunos casos, puede que se tenga derecho a una devolución menor de la esperada. Por lo tanto, antes de presentar una declaración complementaria, es aconsejable consultar con un asesor fiscal o profesional especializado para comprender plenamente las implicaciones de dicha modificación.
En Altec Asesoría estaremos encantados de asesorarte antes de realizar modificaciones en la declaración de la renta para evitar problemas futuros y garantizar el cumplimiento de las obligaciones fiscales de manera adecuada.
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